viernes, 1 de febrero de 2019
Mitos y verdades en torno al debate del aborto – La resolución inexistente
Mitos
y verdades en torno al debate del aborto
La resolución inexistente
Por Juan Carlos Monedero (h)
Publicado el 31 de enero de 2019 en Diario Nox Salta
Si hubo una cuestión que se discutió acalorada y
permanentemente el pasado 2018, sin dudas fue el aborto. A lo largo y a lo
ancho de este debate desigual –el
apoyo de por lo menos ¾ de los titulares de los medios de comunicación al
proyecto de legalización no permite engañarse– los argentinos escuchamos, entre
atónitos e indignados, los más variados enunciados: que el feto no es persona,
que la madre está esclavizada por su
embrión, que las mujeres pobres también tienen “derecho” a matar a sus hijos sin
correr riesgos, y un sinnúmero de recursos pretendidamente argumentativos. Pero
los hechos son tozudos y la realidad no desaparece simplemente tapándose los
ojos. Y así, casos como el de Concordia (Entre Ríos) y el reciente en Jujuy,
ponen al desnudo la trama: en el altar de lo políticamente correcto, argentinos
indefensos están siendo sacrificados.
En este contexto dramático, hay un mito particular sobre el
cual deseamos hundir el bisturí. Nos referimos a la supuesta existencia de una
resolución, emanada por el Ministerio de Salud de la Nación en el año 2010, que
daría vía libre a la práctica del aborto no punible en los hospitales. Se cree
que Juan Luis Manzur activó en julio de ese año la Guía Técnica para la Atención Integral de los Abortos no punibles, cuando
ejercía el cargo de Ministro de Salud, designado por el kirchnerismo.
Lo
cierto es que, a pesar de haberse realizado todos los pasos administrativos
previos, la guía no tiene resolución ministerial.
La resolución 1184/2010 –sobre la cual innumerables periodistas y militantes
abortistas escriben y pronuncian latosos discursos– no existe. No está en el
boletín oficial.
Esto ya había sido dicho por el propio Manzur el 21 de julio
del 2010, 24 hs. después de que el protocolo para matar inocentes fuese colgado
en la página de la cartera del Ministerio de Salud. La portada, informó Página/12, rezaba: “Los procedimientos previstos por esta Guía son de
aplicación establecida por Resolución Ministerial N° 1184 del 12 de julio de
2010”[1]. Pero el
entonces ministro sostuvo que tal resolución no existía, generando la
cólera de los elementos abortistas. Y el 31 de julio de ese mismo año, Página/12 visibilizó otro reclamo de las
verdes, que exigían la firma de la resolución por parte del ministro a fin de
obtener ese aval político por el que tanto suspiran.
Hasta tal punto subsiste el equívoco en gran parte de la opinión
pública –tanto celeste como verde– que la misma ley 4796 de la provincia de Río
Negro adhiere a esta guía alegando en su
art. 3 la vigencia de una resolución que nunca existió. Ahora bien, la
ciudad de Cipolletti está en Río Negro. ¿Se puede creer que es la misma provincia
donde el médico Leandro Rodríguez Lastra está siendo procesado por no haber
ejecutado a un bebé mediante un aborto?
Sin lugar a dudas –y desgraciadamente para los inocentes que no
pueden defenderse– este debate seguirá por algún tiempo en la opinión pública.
Es de desear que la ideología ceda el paso a la evidencia científica, y que la
justicia y el bien común no quede supeditada a los intereses personales.