1. En su famoso ensayo Política británica en el Río de la Plata (1936),
Raúl Scalabrini Ortiz sacó a la luz la dependencia y el sometimiento a
los que estaba sometida nuestra Patria en 1936: la Argentina, lejos de
ser un país soberano, era en los hechos una simple colonia del Imperio
Británico, ya que la mayoría de sus empresas y más de la mitad de su
territorio estaban en manos de individuos y empresas anglosajonas.
2. En esta misma línea, en varias oportunidades el general Perón
explicó que, en sus dos primeras gestiones de gobierno (1946-1955), la
política que llevó a cabo fue la de impedir que la riqueza argentina se
“fugara” por todos los circuitos y canales que durante décadas había
utilizado el Imperio Británico. Además de generar riqueza exportable,
con su correspondiente ingreso de divisas, Perón desarrolló todo un
sistema comercial, industrial y financiero que puso fin al egreso de las
divisas ingresadas: creó la Marina Mercante, nacionalizó el Banco
Central y los depósitos bancarios, nacionalizó el sistema de
aseguramiento, etc., y fundamentalmente no adhirió a los instrumentos
bancarios-financieros creados por la plutocracia financiera imperialista
–Fondo Monetario Internacional y Banco Mundial-, ni tampoco se endeudó
tomando créditos externos. Solo así, sobre la base de la independencia
económica y financiera conquistada, pudo sustentar la soberanía política
y la justicia social que implementara en su gestión gubernamental.
3. Pero esta forma sutil de antiperonismo social-demócrata que
representa el kirchnerismo no podía dejar de sentirse superior a Perón.
Decimos esto, no sólo porque la monarquía santacruceña se ha
reivindicado soberbiamente como mejor que el General Perón en su gestión
de gobierno (“el mejor gobierno en los 200 años de la historia
nacional”), sino porque además se jacta de haber implementado la
“justicia social” en nuestra Patria (en realidad mera limosna social),
pero a través del endeudamiento externo con el poder financiero
plutocrático e imperialista[1].
Es decir, el poder financiero globalizador, sin patria y sin bandera,
es la fuente de la limosna social kirchnerista: quienes han saqueado
financiera y económicamente a nuestra Patria financian, gracias al
kirchnerismo, la pobreza y miseria que ellos mismos han engendrado.
Como se puede apreciar en el informe oficial del Banco Mundial que
sigue a continuación, ya en marzo de este año el gobierno debió recurrir
al endeudamiento externo para financiar la limosna social que pretende
ser una “política revolucionaria”: el subsidio para los jóvenes que no
estudian ni trabajan y la famosa Asignación Universal por Hijo-200
pesos. En un primer momento, los fondos de estos dos subsidios eran
“aportados” por la ANSES, es decir, el dinero de los jubilados servía
para sembrar de limosna a los pobres de la Patria. Agotadas las arcas
del organismo, ahora el kirchnerismo subsidia la pobreza contrayendo
deuda externa, con el criterio aberrante de endeudarse en dólares para
financiar consumo en pesos de los pobres de nuestra Patria. Nada de
gravar la renta financiera exenta de impuestos, nada tampoco de gravar
las ganancias del juego, ni tampoco gravar las ganancias extraordinarias
de quienes en 7 u 8 años han multiplicado por 9 ó por 10 su patrimonio:
para el kirchnerismo social-demócrata, el camino de la liberación
nacional y de la justicia social pasa por endeudarse con el poder
financiero internacional. En este sentido, podemos preguntarnos: ¿la
emperatriz del Calafate es o se hace?
Comunicado de prensa del Banco Mundial Nº:2011/362/LAC
Argentina/BM: Se expanden programas de protección social para beneficiar a la niñez
Buenos Aires, 10 de marzo de 2011.- El Directorio del Banco Mundial
(BM) aprobó hoy un préstamo de US$480 millones para incrementar la
cobertura de dos programas clave de transferencia de recursos monetarios
y servicios a personas desempleadas y familias con niños menores de 18
años en la Argentina.
Se trata de un financiamiento adicional del Proyecto de Protección
Básica, aprobado por el Banco en 2009, que prevé continuar el apoyo al Seguro de Capacitación y Empleo (SCE) y a las Asignaciones Familiares, incluyendo ahora a la Asignación Universal por Hijo. Además, se brindará asistencia técnica para continuar una implementación exitosa incluyendo un sistema de monitoreo eficaz.
El Seguro de Capacitación y Empleo es un programa, liderado
por el Ministerio de Trabajo, que proporciona un ingreso básico y apoyo a
trabajadores desocupados, para actualizar sus competencias y facilitar
su inserción laboral. En los últimos dos años, casi el 20 por ciento de
los trabajadores participantes en el SCE encontró un trabajo formal y
durante 2011, se prevé que cerca de 20.000 desempleados participarán en
el programa.
En 2009, Argentina introdujo la Asignación Universal por Hijo (AUH)
en el sistema de Asignaciones Familiares, por la cual los padres de
menores de 18 años, que estén desocupados o con empleos informales,
perciben un ingreso de $220 pesos mensuales, aproximadamente 55 dólares
estadounidenses. En septiembre de 2010, casi 3,4 millones de niños
estaban recibiendo esta asignación. El proyecto aprobado hoy, apoyará
los esfuerzos de la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSES)
para expandir la cobertura de la AUH a los potenciales beneficiarios
que, siendo elegibles, aún no han sido registrados, y a la vez mejorar
la información al público sobre el programa.
“El impacto social y económico de estos programas es muy
significativo y su expansión permitirá avanzar hacia niveles de
cobertura mayores, que han de resultar en una reducción significativa de
la indigencia y la pobreza en Argentina y en una mejor inserción en el
mercado de trabajo de los trabajadores más vulnerables” sostuvo Penélope J. Brook, Directora del Banco Mundial para Argentina, Paraguay y Uruguay.
El proyecto tiene tres áreas fundamentales de acción:
1. Provisión de financiamiento para el Seguro de Capacitación y
Empleo: Apoyará la expansión de cobertura hasta alcanzar a unos
-160.000 desempleados hacia fines de 2012, financiando los beneficios
monetarios, que incluyen un pago mensual de $225 pesos, así como
viáticos y otros incentivos.
2. Provisión de financiamiento para las Asignaciones Familiares:
Apoyará la expansión de la cobertura de las asignaciones por niño
(incluyendo la AUH). Se espera que, para fines del año 2012, el sistema
haya registrado a cerca de 450.000 niños adicionales.
3. Asistencia técnica: Junto al Ministerio de Trabajo y ANSES se
mejorara la implementación y el monitoreo de los programas. Se prevé la
realización de la Segunda Encuesta Nacional sobre Seguridad Social y
Protección Social, la instalación de un centro de datos alternativo para
asegurar un manejo eficiente y seguro de la información de los
beneficiarios del SCE, y el diseño de un proceso de registro para
identificar e inscribir a potenciales beneficiarios en el programa de
Asignación Universal por Hijo.
El Proyecto será financiado con un préstamo del BIRF de $480 millones de dólares de margen variable, reembolsable en 26 años.
[1]
Así lo ha informado oficialmente el 9 de marzo de este año el Banco
Mundial, presidido actualmente por un delegado de la banca Goldman-Sachs
(uno de los dueños de la Reserva Federal estadounidense). Esta
información puede ser constatada en http://web.worldbank.org/WBSITE/EXTERNAL/BANCOMUNDIAL/EXTSPPAISES/LACINSPANISHEXT/0,,contentMDK:22855039~menuPK:508626~pagePK:2865106~piPK:2865128~theSitePK:489669,00.html