jueves, 2 de mayo de 2019

Sobrenatural protesta ante Francisco - Antonio Caponnetto

Sobrenatural protesta ante Francisco - Antonio Caponnetto



 Santo Padre:


Nosotros, los 26 mártires ucranios, víctimas del Comunismo, beatificados solemnemente en el año 2001; los 1725 mártires beatos, exterminados como consecuencia de la persecución marxista en España; los beatos mártires eslovacos, Vasil Hopko y Zdenka Cecilia Schelingova, asesinados por el régimen comunista que capturó a Eslovaquia; el beato mártir Jerzy Popiełuszko, asesinado en Polonia por los agentes del Soviet, el beato Monseñor Anton Durcovici, y el Padre Vladimir Ghika, asesinados por el comunismo rumano, los 17 mártires y beatos laosianos ejecutados por las milicias rojas  del Pathet Lao, el beato mártir Teofilius Matulionis, primera víctima del comunismo en Lituania, junto a todos los mártires auténticos abatidos por odio a la Fe, bajo los segadores signos de la hoz y el martillo, devolvemos a Vuestra Santidad las palmas del martirio y las coronas de la Beatitud,que oportunamente la Santa Madre Iglesia nos otorgara, hasta que no les sean quitadas formalmente al impostor Enrique Angelelli y sus cómplices de la Revolución Marxista en la Argentina, que por vuestra insensatez y estulticia habéis elevado a los altares el pasado 27 de abril del año 2019.



Son ellos, artífices de la insurrección atea, apátrida, amoral y siniestra. O somos nosotros, las víctimas reales y sangrantes de sus ideologías ruinosas y de sus conductores homicidas.
No hay sitio en los templos para ambos. No hay espacio compartido en las hagiografías. No hay sacras superficies ni celestes recodos para albergar a la vez a los hijos de la luz y a los de las tinieblas.
Porque no se puede servir a dos señores. Y ¡ay de aquellos!, simples laicos o encumbrada jerarquía, que por conformaros al mundo, junto a Vos, han consentido tamaña afrenta, difícil de perdonar por constituir abiertamente pecado de escándalo.
Habéis ido demasiado lejos en vuestra audacia de pastor errático y demagogo. Y os han acompañado en el sacrilegio, la desmesura y la blasfemia, un haz nutrido de clérigos ladinos, a cada uno de los cuales pedirá cuenta a su hora el Señor Implacable.
Sí; dignos y firmes, os devolvemos la beatitud con que se nos honrara, y que ahora deshonra Su Eminencia, en un acto luctuoso y ultrajante, indigno de la Sede de Pedro y propio de la cátedra de fuego y humo.

¡Cuidado con la santa ira de las legiones santas!



ANTONIO CAPONNETTO
                                         

Nacionalismo Católico San Juan Bautista