PEQUEÑO APUNTE DEL DÍA
El Partido Comunista ya no oculta más el juego: quiere que la Jefa de La Gavilla siga 10 años más. A
ella la dejarán seguir metiendo la mano en la lata-¡cirugía plástica
para las axilas de “la abogada existosa”, por favor!-mientras los tovarichts seguirán con su revolución cultural, hasta que del país no quede nada de nada. Luego decidirán qué hacer en nombre del “bolivarianismo”,donde seguramente se prenderá gustoso el millonario general Milani, candidato a ser el primer jefe del “Ejército Nacional y Popular”, o quizás de la “Guardia Revolucionaria Indoargentina”.
Pido al lector que haga una calma lectura y reflexione sobre el editorial del 27 de junio de Nuestra Propuesta, titulado: “No retroceder ni para tomar impulso”, cuyo párrafo central lo dice todo:
“Con el llamado a
defender lo logrado, muestra un cambio auspicioso de reciente data, en
cuanto al papel protagónico que la Presidenta pretende del pueblo,
entendemos que se puso un marco distinto, por fin más confrontativo con
el poder real, en una perspectiva que anticipa una lucha electoral que
definirá entre agosto y octubre la posibilidad, si es que priva la
decisión política en tal sentido, de que se materialicen las bases del
proclamado proyecto nacional y popular, hasta hoy presente en
el discurso político pero con pocas concreciones en el plano de las
relaciones de poder económico que es donde en última instancia se define
la pelea.
Interpelar al pueblo es
sin duda un gran paso y proclamar objetivos que hacen a una revolución
democrática y nacional un salto cultural, pero es insuficiente, si no se
acompaña de la constitución de un frente que contenga a todas las
fuerzas y organizaciones que coinciden en que en esta etapa se debe
profundizar en una línea de cambios estructurales, que
consoliden lo que se ha avanzado y den paso a una transición hacia
superiores estándares de igualdad, justicia y soberanía.
Unidos y Organizados
puede ser el germen de ese frente político social y la cantera de
cuadros para la gestión de ese nuevo Estado, pero se requiere que en su
interior se definan instancias unitarias de decisión política y marcos
de discusión sobre la impronta que debiera tener ese proyecto,
que para ser de liberación nacional y social debe, indefectiblemente,
atacar el carácter dependiente de la estructura económica-social y
terminar con sus personeros. El futuro inmediato es sin duda sinónimo de conflicto y para ello hay que unirse y prepararse para el combate.
Justamente, entre las
batallas a librar y para lo cual el resultado electoral no es aleatorio,
una dela más urgentes es dotar al país de una nueva y profunda
Constitución, que institucionalice los aciertos de este
gobierno y determine un nuevo papel del Estado, que avance decididamente
sobre la esfera del capital y se constituya como herramienta de
desarrollo y distribución de la riqueza a favor de las clases
populares”.
Saque cada uno sus propias conclusiones, preparándose para actuar en
consecuencia. Con la política del avestruz estaremos fritos, y a plazo
no muy largo.