lunes, 15 de julio de 2013

LAS NOCHES DE LAS BESTIAS

 

  The Purge. La noche de las bestias

  Anoche fui al cine a ver esta película dirigida por el estadounidense James DeMonaco. No me había hecho grandes ilusiones. Ya de partida, el argumento me parecía absurdo.
Y es que esta película parte de la idea de unos Estados Unidos en un futuro próximo que han superado la crisis económica, índices alarmantes de delincuencia y un periodo de gran conflictividad bélica, y ha hallado la prosperidad, el orden y la paz instaurando cada 21 de marzo la llamada noche de la “purga”: durante 12 horas se permite a los ciudadanos cometer toda clase de crímenes, incluso el asesinato. La película basa ese planteamiento en la idea de que el ser humano necesita desahogar sus instintos violentos para solucionar los citados problemas. Un completo disparate, en fin, que olvida que precisamente nuestros instintos más violentos se dominan con la educación, la ética y la moral, y en último término mediante el imperio de la ley, y no dando rienda suelta a la violencia y al crimen durante una noche cada año.
No obstante, me quedaba la duda de si DeMonaco habría sabido aprovechar un argumento absurdo, aunque ciertamente original, para hacer una película digna de ver. No es así. En buena parte por culpa de la persona que ha perpetrado el guión, que me ha servido para pasarme la película llevándome las manos a la cabeza ante ciertas situaciones y comentarios absurdos que soltaban los actores. Por lo demás, mucha violencia y escenas muy duras, no aptas para menores ni para personas sensibles. Lamentablemente ni siquiera funciona como película de denuncia -o lo hace de forma tan torpe como “La naranja mecánica”-, y a lo sumo sirve como reflexión muy ligera para concluir lo evidente: la anarquía no es más que un camino hacia el caos. Resumiendo: película mala y que no merece lo que cuesta hoy en día una entrada al cine.