La Justicia desestima una demanda de Público contra Contando Estrelas
El 7 de septiembre de 2010 Público se convirtió en el
primer periódico nacional español -y de momento el único- que demandaba a
un bloguero. Ese día Mediapubli, entonces propietaria del diario, presentó una demanda por importe de 60.000 euros (casi 10 millones de pesetas) en la que me acusaba de intromisión ilegítima en su derecho al honor por publicar un artículo titulado “Apple se lía con la ultraizquierda mediática”, que podéis leer aquí.
Un poderoso magnate mediático contra un bloguero mileurista
Además del pago de esa exagerada indemnización -por cuyo importe cabe deducir que Público otorga a este modesto blog una audiencia y una influencia muchísimo mayor de las que tiene-
y de las costas judiciales -elevadísimas a causa del exagerado importe
de la demanda-, Público reclamó a la Justicia la retirada de mi
artículo, la publicación a mi costa de la sentencia, e incluso remitir
la sentencia a Apple España y a las centrales de Apple en Londres y
Cupertino.
Os podéis imaginar lo que significa para un simple bloguero,
autónomo y mileurista, vérselas ante la Justicia con una empresa
propiedad de un conocido millonario con un imperio mediático a su servicio,
un imperio -dicho sea de paso- muy afín al partido que estaba por
entonces tanto en el gobierno de la nación como en el gobierno autónomo
catalán: ese mismo año el gobierno de Montilla concedió a Público 410.000 euros en subvención para montar su edición catalana (en 2009 le había concedido otra subvención de 350.000 euros), a lo que hay que añadir que Público era uno de los medios impresos más beneficiados por las suscripciones institucionales en proporción a su tirada. Siendo como soy contribuyente y pagando religiosamente mis impuestos, yo
nunca he pedido y por tanto no he recibido ni un céntimo en
subvenciones. Este blog ni siquiera tiene publicidad: lo pago de mi
bolsillo. Afortunadamente, la indefensión no ha sido absoluta gracias al apoyo prestado por HazteOir.org
para hacer frente a esta demanda. Mi agradecimiento a Ignacio Arsuaga y
a todos los amigos de HO. También agradezco su excelente defensa a mi
abogado, Javier María Pérez Roldán, y a mi familia por el apoyo
constante que me han brindado durante esta persecución judicial. Si no
fuese por ellos, mi libertad de expresión habría resultado pisoteada.
Público consideró insultante ser tachado de ‘ultraizquierdista’
En su demanda, y entre otras consideraciones, Público
calificó de “insultantes, injuriosas y calumniosas” mis referencias a
ese diario como “panfleto ultraizquierdista”, “radical” y “antisistema”.
Quien se haya asomado alguna vez por las páginas de ese diario ya sabe
perfectamente cuáles son sus coordenadas ideológicas. Las pruebas son
abudantes. Sin ir más lejos, en el escrito de defensa señalamos durante
el juicio las obras marxistas y anarquistas publicadas por el diario bajo el título de “pensamiento crítico”.
La Audiencia dice: “el apelativo ultra es de uso corriente por parte de Público”
En cuanto al sentido insultante o no del término “ultra”, basta repasar publicaciones como las siguientes:
- Público llamando “juez ultra” a un magistrado del Tribunal Constitucional (29-9-2007)
- Público llamando “ultra conservadores” a cristianos protestantes que rezan por España (6-2-2008)
- Público llamando “ultraconservadores” a tres magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (30-4-2008)
- Público llamando “grupos ultracatólicos” al Opus Dei, la Asociación Católica de Propagandistas, los Legionarios de Cristo, Comunión y Liberación, Schoenstatt y el Camino Neocatecumenal (14-4-2009)
- Público llamando “ultraliberal” al Instituto Juan de Mariana y al catedrático Jesús Huerta de Soto (19-7-2009)
- Público llamando “organizaciones ultracatólicas” al Foro Español de la Familia y a la plataforma ciudadana HazteOir.org (31-10-2009)
- Público llamando “ultraderecha eclesial” a HazteOir.org, a Derecho a Vivir, al Centro de Estudios Universitarios (CEU) y al movimiento católico Legionarios de Cristo (12-2-2010)
- Público llamando “ultracatólicos” a los ciudadanos que se manifiestan contra el aborto (7-3-2010)
Son sólo una parte de los ejemplos que pusimos en el juicio, y todos ellos publicados antes de la fecha de la demanda de Público. Precisamente la Audiencia de Barcelona ha estimado la paradoja de que Público considere insultante un término que usa con tanta frecuencia: “el
apelativo ultra es de uso corriente por parte de Público para referirse
a quienes sustentan posiciones o realizan conductas de las que ese
medio de comunicación informa en tono abiertamente crítico (…) de tal
manera que no puede considerarse que la utilización de ese mismo
apelativo para reprobar su línea informativa constituya un atentado
contra su propia estimación profesional”.
A propósito de una viñeta antisemita en las páginas de Público
Así mismo, el diario Público consideró que lesioné su derecho al honor al decir que “Público acogió en su web una viñeta judeófoba denunciada por el Observatorio del Antisemitismo en España.” Con esa afirmación me limitaba a constatar un hecho. Es más: enlacé esa afirmación con la propia web del citado Observatorio, dependiente del Movimiento contra la Intolerancia, en la que se acusaba a la citada viñeta publicada por el diario de ultraizquierda de lo siguiente: “Utilización de una simbología religiosa antisemita“. En su sentencia, la Audiencia barcelonesa constata ese hecho: “es
cierto el episodio de la publicación en la edición digital del
periódico de una viñeta que una entidad pro-israelí consideró reveladora
de una actitud fóbica hacia el judaísmo”.
Mi artículo es “ejercicio de la libertad de expresión”, según la Audiencia
La Audiencia barcelonesa considera que el artículo publicado en Contando Estrelas “no
supone una intromisión en el honor de la editora demandante, sino que
ha de reputarse prevalente el ejercicio de la libertad de expresión que
encierra”. Por ello, los tres magistrados desestiman la demanda de Público contra este blog y condenan a costas al demandante.
Han sido casi tres años de calvario judicial. Éste es el precio de la libertad de expresión en España.
Quienes no nos vemos amparados por el poder tenemos que hacer frente a
onerosas demandas mientras otros disparan con pólvora del Rey, como se
suele decir. El mal trago ha merecido la pena, como la merece toda
batalla que se dé por la libertad, aunque sea en una situación de tan
clara desventaja como la que he tenido que afrontar yo. Como ya dijo
Miguel de Cervantes en “El Quijote”, “La libertad, Sancho, es uno de
los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella
no pueden igualarse los tesoros que encierra la tierra ni el mar
encubre; por la libertad así como por la honra se puede y debe aventurar
la vida”.