Obama a la espera del “Gran Evento”
Un fuerte rumor
recorre Estados Unidos como la pólvora, incendiando la opinión pública a
su paso. El mismo, se hace eco de la información de en un sombrío
“Boletín de Acción Urgente”, emitido por el Ministerio de Relaciones
Exteriores de la antigua Unión Soviética
Las últimas fotografías muestran a un Obama de semblante preocupado y algo demacrado
De acuerdo con este comunicado y según fuentes de “alto rango” del
Pentágono, el presidente Barack Obama habría iniciado su inminente
traslado, a un búnker de reciente construcción contiguo la Casa Blanca,
en compañía de sus familiares y de algunos de los más importantes
colaboradores de su gobierno, en preparación para los que muchos
servicios de inteligencia del mundo han llamado el “Gran Evento”.
Conforme a estas informaciones, el cierre del gobierno de los Estados
Unidos la pasada semana, no sería otra cosa, más que una “licencia”
otorgada a los funcionarios de ese país, con el fin de que se preparen
para afrontar la caótica situación que pueda desprenderse de los graves
acontecimientos que se esperan en ese país y que puedan pasar, al menos,
estos últimos días en compañía de sus seres más queridos.
El pasado viernes se reunieron en Washington los jefes de finanzas
del G-20, coincidiendo con la bancarrota del gobierno americano, la
marcha de los camioneros a esa ciudad, la emisión del dólar semi-patrón
oro y el cambio de jefe de la Reserva Federal, que por supuesto, siempre
recae en un judío. Todo ello, mientras diferentes senadores instan a
Obama a suspender la constitución y declarar la Ley Marcial para
derrotar a los constitucionalistas.
A una semana de haberse registrado el cierre del gobierno, el
presidente Obama señalaba públicamente que ningún otro mandatario de los
Estados Unidos ha lidiado con una situación así, destacando que ahora
se “tiene una amenaza real hacia las familias americanas”.
Es importante conocer, que a la Dirección Principal de Inteligencia
de Rusia (GRU) le fue notificado la semana pasada, por sus homólogos del
Pentágono, que Obama se preparaba para invocar los poderes que le
otorga la constitución norteamericana, a fin de sostener la unidad de
los diversos estados de la unión que puedan declararse en
“insurrección”. Lo que le permitiría invocar la Ley Nacional de
Emergencias y, en particular, el muy controvertido “Plan de Continuidad
de Gobierno” de los Estados Unidos que le permitiría, en esencia,
gobernar con poderes dictatoriales.
Es fundamental tener en cuenta, según indica este comunicado, que
Barack Obama amplió el mes pasado la Declaración post-9/11 de
Emergencia, en silencio, a fin de contar con el poder necesario para
hacerse cargo de los Estados Unidos de América, si él, así lo
considerara necesario.
Igualmente se pudo saber, que el misterioso búnker de la Casa Blanca,
se completó en septiembre del año pasado, a un costo de 86 millones de
dólares, tras algo más de dos años de trabajo, manteniéndose la
finalidad del mismo en el más hermético de los secretos.
Junto a Obama, en su plan para asumir el control de los Estados
Unidos, continúa este comunicado, se encuentra una corte de periodistas
(también conocida como “presstitutes”) que incluye a muchos de los
mejores periodistas conservadores de esa nación y que fueron convocados,
ayer en la madrugada, a una reunión secreta “off the record” en la Casa
Blanca.
¿Para qué fines está ordenando Obama, a sus aliados de los medios de
comunicación, el preparar al pueblo estadounidense?, concluye el
comunicado.
También se puede extraer de declaraciones recientes de importantes
personalidades de los estados Unidos, otros hechos, que nos ilustran la
difícil situación por la que atraviesa esa nación en la actualidad:
El ex subsecretario del Tesoro de EEUU, Paul Craig Roberts, que aboga por que Obama declare una emergencia nacional y gobierne como dictador.
La congresista, Sheila Jackson Lee, que aboga por que Obama declare la Ley Marcial.
El columnista del New York Times, Thomas Friedman, que defiende que el pueblo norteamericano se mantenga al lado de Obama, debido a que la propia democracia está en juego.
El columnista invitado del New York Times y profesor de historia de la Universidad de Princeton, Sean Wilentz, que advierte que el régimen de Obama ha dejado de hacer todo lo posible para defender la Constitución y que ha llevado a ese país a la ruina.
El Premio Nobel de Economía, Paul Krugman, quien defiende que Obama ha creado una crisis constitucional con el fin de desafiar a sus chantajistas republicanos.
Pero el mayor peligro que enfrenta el pueblo estadounidense, según
este comunicado, es el hecho de que Obama se esté convirtiendo en una
especie de Abraham Lincoln de nuestros tiempos. A semejanza, de quien
fuera el 16º Presidente de los Estados Unidos y que diseñó su propia
Guerra Civil, entre 1861 y 1865.
Al igual que Obama, Lincoln fue elegido durante uno de los periodos
más polémicos de la historia de América, en el cual se discutían los
derechos de los Estados individuales en contraposición con los del
gobierno central federal, en todo aquello que tuviera relación con la
esclavitud.
Lincoln, obligó a su país a iniciar una guerra civil y se convirtió
en el primer líder de los Estados Unidos en suspender la Constitución y
gobernar con poderes dictatoriales. Hoy, muchos estudiosos de Lincoln, y
los partidarios de Obama, informa la Canadian Free Press, dicen que
Lincoln salvó la Constitución mediante la suspensión de las libertades
constitucionales en el Norte, durante toda su administración. Se supone
que “tuvo que destruir la libertad constitucional para poder salvarla”.
Lincoln consideraba, además, que la Constitución era un impedimento
para sus ambiciones políticas, mostrando su total desprecio por la Ley
de Tierras (la ley de los fundadores de los Estados Unidos), lanzando
una invasión militar contra el Sur, sin el consentimiento expreso del
Congreso de los EEUU.
Lincoln suspendió el hábeas corpus y encarceló a miles de personas,
sin juicio previo, por oponerse a sus políticas públicas. Censuró los
medios de comunicación e, incluso, encarceló numerosos editores de
diarios que escribían en contra de sus tácticas. Además, confiscó las
armas de fuego, evitando así que sus enemigos se armaran. Como bien
advierte este artículo: “¿Le empieza a sonar familiar todo esto?”.
Así que, hoy día, continúa el boletín, Obama se ha convertido en el
primer Presidente en la historia norteamericana en declarar que no
negociará con sus homólogos del Congreso de los Estados Unidos. Ordenó a
los trabajadores federales el “hacer la vida para la gente tan difícil
como se pueda”. Ha suspendido toda la supervisión de su enorme aparato
de espionaje y tiene la más terrible y temida policía secreta desde la
Guerra Fría. Además, posee el control sobre más de 120.000 agentes
federales armados que puede enviar contra su pueblo, en un momento dado,
y que han sido considerados “tan potentes como los militares de los
EEUU”.
En resumen, y tomando en serio las advertencias de este comunicado,
con Obama “seguro en su búnker”, amenazando a los sacerdotes con
arrestarlos si ministran a sus soldados en esta situación y con los
bancos estadounidenses llenando sus cajeros automáticos con un 30% más
de dinero en efectivo, por si se produjeran retiros masivos a causa del
pánico, estas advertencias de la GRU en relación a que un “gran evento”
pueda producirse en los Estados Unidos, no pueden ser menospreciadas; ya
que, de hecho, apuntan a un vuelco por completo del estilo de vida
americano, en las próximas semanas.