¿Somos "soretes"? Los documentos que 'condenan' a Zaffaroni, el
protegido K
Cristina Fernández ha recrudecido en las últimas semanas su embestida
contra la Corte Suprema, particularmente contra su titular, Ricardo
Lorenzetti. Pero nada dijo sobre Eugenio Zaffaroni, cuyo pasado como
juez federal penal durante la dictadura militar no puede obviarse (sobre
todo desde la mirada ladriprogresista...). En esta nota, algunos
documentos que muestran cómo Zaffaroni rechazaba protección legal a
familiares de desaparecidos. "Somos soretes si cuestionamos a
Zaffaroni", dijo en 2011 Hebe de Bonafini (pero en 1999 lo había
denunciado).
Zaffaroni rechazó el Hábeas Corpus presentado por la familia de Alicia
Lisso.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) En las últimas semanas hemos asistido
al recrudecimiento de la embestida de Cristina Fernández y sus
funcionarios contra los jueces de la Corte Suprema de Justicia, luego
del fallo que declaró la "inconstitucionalidad" de la reforma del
Consejo de la Magistratura.
La Presidente dirigió sus dardos principalmente hacia el presidente del
Máximo Tribunal, Ricardo Lorenzetti, y en una especie de 'guerra sucia'
le mandó a la Afip. También tuvo críticas -vía Twitter- hacia Carlos
Fayt, el "casi centenario miembro de la Corte", de quien cuestionó que a
su edad (el 5 de julio cumple 95 años) aún forme parte de la Corte.
Pero de quien nunca dijo nada, y de hecho desde el kirchnerismo se lo
defendió cuando fue acusado de tener prostíbulos en departamentos de su
propiedad, fue de Eugenio Zaffaroni. Aunque, por su pasado, quizás sea
el más polémico de los miembros de la Corte (sobre todo desde el punto
de vista ladriprogresista)
Que Zaffaroni se desempeñó como juez durante la última dictadura militar
no es una novedad. Respecto a que Hebe de Bonafini lo haya denunciado
en 1999, pero luego lo haya defendido en 2011, tampoco hay mucho para
decir (más allá de la evidente kontradicción).
Lo que sí es una novedad es la difusión de algunos documentos que
muestran cómo Zaffaroni, actual juez de la Corte Suprema, rechazaba
protección legal a familiares de desaparecidos. ¿Qué dirá Cristina
ahora?
“Resuelvo rechazar el presente recurso de Habeas Corpus número 362
interpuesto a favor de Alicia Lisso, sin costas. Notifíquese”. Con estas
palabras, el entonces juez federal penal Eugenio Zaffaroni negaba la
posibilidad de que los familiares de Alicia Lisso, una estudiante de La
Plata, la protegieran contra una detención arbitraria. El portal Plaza
de Mayo publicó estos valiosos documentos, que dan más indicios sobre el
pasado de Zaffaroni.
Según había manifestado Lidia Palestrini de Lisso en el pedido de
“habeas corpus”, su hija -que entonces tenía 23 años- había sido
detenida en su domicilio durante la madrugada del 27 de octubre de 1976
por una “comisión que se identificó como perteneciente a las fuerzas de
seguridad”.
Alicia fue vista en un campo clandestino de detención de Los Plátanos.
Sus restos óseos fueron recuperados, identificados y entregados en 2011 a
sus familiares. Los mismos que habían intentado -sin éxito- que la
justicia actuara para protegerla: Zaffaroni había rechazado su pedido.
“Le solicito a Vuestra Señoría que libre despachos telegráficos a efecto
de requerir, en un plazo perentorio de 24 horas, informes al señor
Ministro del Interior, al señor Jefe de la Policía Federal y al
Comandante del Primer Cuerpo del Ejército, sobre si Alicia Lisso (…) se
encuentra detenida en dependencias de alguna repartición, por qué causa y
a disposición de qué autoridad competente”, le pedía la madre de la
desaparecida al entonces juez Zaffaroni, luego de contar cómo había
recorrido dependencias para dar con el paradero de su hija sin obtener
ningún resultado.
“Zaffaroni juró bajo los estatutos de la dictadura en el fuero penal,
por eso sabía perfectamente bien cuál era su rol en esa etapa, y lo
cumplió", señala Enrique “Cachito” Fukman, miembro de la Asociación de
Ex Detenidos Desaparecidos. Y añade que "uno de sus roles era rechazar
los habeas corpus, por eso la aparición de este documento no nos
sorprende”.
"Hay que sacar de la justicia a todos los jueces que fueron cómplices de
la dictadura (...) Todos aquellos que de una u otra forma permitieron
con su acción que el genocidio se concretara y garantizaron la impunidad
deben rendir cuentas ante la justicia. Incluso, por una cuestión de
conciencia, deberían presentarse ellos mismos ante la justicia y decir:
'Soy responsable de esto'. Zaffaroni juró por los estatutos de la
dictadura y respondió a ese juramento, que implicaba cumplir con los
mandatos del Proceso de Reorganización Nacioinal", explicó Fukman al
portal Plazademayo.com
# ¿Somos soretes?
"Somos soretes si cuestionamos a Zaffaroni", aseguró Hebe de Bonafini en
agosto de 2001, cuando dicho juez estaba complicado por el escándalo de
los prostíbulos. "Es un tipo genial", agregó. Sin embargo, en 1999 la
misma presidenta de Madres de Plaza de Mayo lo había denunciado.
Hace doce años, Hebe de Bonafini presentó un denuncia en la Justicia
Federal contra "los jueces de la dictadura" y en el listado de más de
400 magistrados figuraba el actual ministro de la Corte, Eugenio
Zaffaroni.
En diciembre de aquel año, Bonafini y su mano derecha, María "Porota"
Meroño fueron a Comodoro Py para pedir que se investigue a los jueces de
todas las instancias y fueros que fueron nombrados por el último
gobierno militar por "delitos de asociación ilícita calificada;
homicidios calificados; lesiones graves y gravísimas; violaciones;
privaciones ilegales de libertad; torturas y apremios ilegales".
El petitorio judicial también los acusaba de "sustracción, retención y
ocultamiento de personas; violación de domicilios; robos; extorsiones;
estafas y defraudaciones; usurpaciones; daños; sedición traición;
falsificación de documentos en general, etc".
El petitorio involucraba a todos los funcionarios judiciales que
ejercían en 1981 y todo juez que juró entre el 24 de marzo de 1976 y el
20 de septiembre de 1983. Entre ellos, Zaffaroni.
Ahora Hebe asegura que "no hay nadie que lo ensucie por más que le tiren
basura. ¿Quiénes somos nosotros para pedirle explicaciones a
Zaffaroni?", se preguntó.
Bonafini incluso consideró que el ministro de la Corte "no tiene que dar
examen de nada" por los prostíibulos que funcionaban en sus
departamentos alquilados, pero omitió que hace 12 años lo consideró un
"colaboracionista de los militares".