martes, 16 de julio de 2013

UN DIOS PROHIBIDO

Publicado en Revista Cabildo 
Nº103-Mes de Mayo-Junio de 2013-3era.Época

CINEMATOGRÁFICAS
Pablo J. GINÉS
De pluma ajena
Una Historia Sobrecogedora:
 "Un Dios Prohibido"

EL Padre Jorge López Teulón conoce de cerca a los mártires de la persecución religiosa en España de los años 30: es postulador de más de novecientos mártires,  responsable  de  la  web www.persecucionreligiosa.es y divulgador de sus historias desde su blog en ReL.
Él ha visto la película "Un Dios prohibido", que se estrenó el viernes 14 de junio en cuarenta ciudades españolas, y lo tiene claro: "Es un sueño hecho realidad. Id a los cines. De veras, podéis gastar vuestro dinero en cine español". Puro Spain: made in Ciudad Rodrigo. ¡Pata negra! No pienso esperar al día del espectador para que me salga más barato. Y pienso invitar a la gente al cine.
López Teulón [...] en "Un Dios prohibido", asegura, "ni sobra ni falta nada. La tensión de los 124 minutos que dura la película ofrece al espectador el relato de una historia trágica y gloriosa. De temores y de ofrecimientos. De martirio católico. Y, por lo tanto, de perdón ".
UN ÚNICO ANTECEDENTE, EN 1951
Como especialista en la historia de los mártires de esa década con¬vulsa, López Teulón felicita a Contracorrientes Producciones por "la valentía de hacer una película dedica a la persecución religiosa. Teniendo en cuenta que la anterior y única es de 1951: «Cerca del Cielo» (sobre el martirio del
 Obispo Anselmo Polanco de Teruel),¡62 años después! el reto era más que considerable.
La historia de "Un Dios prohibido" es la de los mártires claretianos de Barbastro, el obispo mártir Florentino Asensio y del gitano Ceferino Giménez "El Pelé", laico franciscano, primer beato gitano de la Iglesia. Es también la historia de la gente que los mató, y de algunos más que intentaron reducir el número de asesinatos en una vorágine de sangre y consignas. Hubo mu-cha crueldad y ensañamiento, y la película lo recoge. Un periodista que la ha visto asegura que está "al nivel de La Pasión de Cristo, de MelGibson".
UNA PELÍCULA CORAL
Juan Carlos Sánchez, rector del Seminario de Ciudad Rodrigo, ha sido el asesor teológico de la película, y ha ayudado con las localizaciones, porque la película se ha rodado en esta ciudad. El proyecto ha contado con el apoyo de los Misioneros Claretianos. Han participado 53 actores y casi cuatrocientos figurantes, dando como fruto una película coral.
Uno de los retos en una historia de masas enfervorizadas y grupos arrastrados al movimiento es poner cara humana, nombres, a los numerosos protagonistas, y los que la han visto aseguran que lo consigue. En palabras de su director, Pablo Moreno: "Queremos transmitir al final una verdad, que es la verdad de estos chavales, la verdad. Esa vida coherente que ellos transmiten, esa defensa que tienen de si propia fe en las condiciones más extremas que son justo en el momentó en el que están presos en un salón durante tantos días sabiendo que el final va a ser proba blemente la muerte". "Planteamos el choque de ideales que se confunde bajo el terror de la guerra", asegura el director, y añade que se ha buscado el equilibrio en la trama.
Entre los actores se encuentran: Jesús Guzmán, Elena Fuñase, Iñigo Etayo, Juan Alberto López, Jacobo Muñoz, Juan Rueda, José María Rueda, Gabriel Latorre, Juan Lombardero, Mauro Muñiz, Ainhoa Aldeanondo, Alex Tormo, Guido Balzaretti y Jerónimo Salas.
HACER EL GUIÓN, DIFÍCIL
En uno de los preestrenos, el guionista y actor, Juanjo Díaz Polo, admitió que el guión fue "difícil de hacer porque es sobre algo de lo que no se ha hablado mucho" y que "es complicado hacerlo [el guión] sin sacar conclusiones políticas o ideológicas". "Lo interesante no sólo es lo que ocurrió sino por qué ocurrió", asegura. "Me encontré con una historia que tiene algo de universal, la lucha de ideales".
El actor Alex Larumbe ha explicado que para realizar el papel del seminarista martirizado Juan Echarri tuvo que estar con el resto de sus compañeros viviendo en un seminario durante el mes y medio que
duró el rodaje. Su personaje, el seminarista Echará, es "el más rudo, el que pensaba ¿vamos a dejarnos matar sin luchar?, el que luego entra en razón y ve que su destino es entregarse de corazón a esa Providencia".
MÉXICO, POLONIA, ARGELIA Y ESPAÑA, QUÉ?
Hace apenas un par de años, rodar en España una película sobre la persecución religiosa parecía imposible. "Cristiada" ya daba a la laicista México una gran película sobre los mártires cristeros (sobre sucesos de hace casi noventa años) y con "Popieluszko" la tenía Polonia, sobre hechos más cercanos que los españoles, de hace menos de cuarenta años. "De dioses y hombres", sobre los mártires cistercienses franceses asesinados en Argelia en 1996, recibió el Gran Premio del Jurado de Cannes en 2010. ¿Y España, qué? En abril de 2012, preguntábamos a Juan Antonio Martínez Camino, portavoz de los obispos españoles: "¿Por qué no hay todavía películas sobre los mártires, sobre hechos que casi tienen ochenta años?"
Él se mostró muy favorable a la idea: "Es un buen momento para una buena película sobre estos mártires de la fe. Tendría éxito, porque son historias de cine", admitió él. E incluso enumeró algunos posibles protagonistas. "Está el caso del padre Huguet, de Menorca, que sólo llevaba tres meses como cura. O el diácono Juan Duarte. O los seminaristas claretianos de Barbastro. O su obispo. O el obispo auxiliar de Tarragona. Son historias estremecedoras y luminosas. Quien pueda, que se anime y ruede la película", propuso.
LOS QUE NO VEÍAN CLARO
Pero no todo el mundo en la Iglesia lo tenía tan claro. Un sacerdote responsable de la delegación de Cultura de una importante diócesis española, cuando le planteamos la posibilidad, respondió que llevar al cine las historias de los mártires "no es un tema que nos interese [a él y los de su delegación], no queremos hacer ideología". El caso es que "Un Dios prohibido" plantea el tema de los mártires sin buscar hacer ideología.
SIN DIRECTOR EXTRANJERO
Dean Wright, el director de "Cristiada", decía en 2012 que él filmó sobre los mártires mexicanos siendo "un gringo presbiteriano": "Quizá una película sobre los mártires de España necesita a un director extranjero, alguien de fuera que se conmueva con las historias. Y que no haga una película de bandos muy buenos y muy malos, porque eso el público lo rechazará". Pero al final han sido los propios españoles los que han hecho la película. Al final, parece que es clave tener confianza en que se puede hacer, que se pueden filmar películas de mártires.
Rafal Wieczinsky, director de "Popieluszko", tenía dieciséis años cuando los agentes de los servicios secretos de la Polonia comunista mataron al Padre Jerzy Popieluszko, hoy beato. "Cuando en 2005 presentamos el proyecto de la película nos dijeron que no seríamos capaces de hacerlo", nos explicaba el director polaco. "Nunca antes se había hecho una película sobre estos temas en Polonia, la gente pensaba que no se podía hacer, que había que esperar más. Pero lo hicimos los de mi generación, los que éramos muy jóvenes en los ochenta. Y ahora en Polonia cada año se rueda una película sobre la época comunista". ¿Pasará esto en España? ¿Una película sobre la persecución cada año? Desde luego, historias y casos no faltan.
MÁS DE 8000 MÁRTIRES, NI UNA SOLA APOSTASÍA
En 1934 empezó el homicidio planificado y sistemático de sacerdotes y religiosos en España: fueron treinta y tres los asesinados ese año. Ocho ya están canonizados. En 2014 se cumplen ochenta años de esos hechos. Luego llegaron las matanzas de religiosos (personal no combatiente, desarmado y claramente identificable) durante la Guerra Civil: más de ocho mil de ellos fueron asesinados. No se conoce ni un solo caso de apóstata: nadie a quien se ofreciera salvar la vida a cambio de blasfemar o renegar de la fe optó por ese camino.
Quizá por eso una película que trate este tema tenderá a ser una película coral. •