El PSOE mantiene a un dirigente condenado por maltrato y llama machista a la derecha
Hoy el PSOE ha vuelto a tirar de la demagogia para acusar a la derecha de machista, sexista y otras “palabras policía” tan del gusto de los partidarios del pensamiento único progre. Tras el videoblog publicado anteayer por Iñaki Gabilondo,
reprochando a Soraya Sáenz de Santamaría un posible descuido de su
marido y de su hijo por atender a sus obligaciones en el gobierno, ¿pensarán en el PSOE que el periodista de PRISA es de derechas?
Feministas por el derecho a vivir
8 de marzo: alegatos feministas frente a los disparates hembristas
El PSOE dice que apoyar a las madres sin recursos es de ultraderechistas
El PSOE mantiene en su cargo a un dirigente que pegó una paliza a su esposa
Pero no creo que Gabilondo, periodista muy afín al PSOE, sea el único
al que su querido partido debería situar en esas coordenadas. También
debe ser de derechas Jesús Eguiguren, que sigue en el cargo después de
ser condenado en 1992 por “haber pegado una paliza a su esposa” (cito las palabras textuales publicada por El País). A pesar de ello, este personaje fue portavoz del PSOE en el Parlamento Vasco entre 1995 y 1998, siendo elegido en 2002 presidente del PSOE en el País Vasco,
un cargo en el que se mantiene 11 años después: el único dirigente de
un partido mayoritario que sigue en su cargo tras haber sido condenado
-insisto- por “haber pegado una paliza a su esposa”.
El PSOE considera pionera a una diputada que rechazó el voto femenino
Personalmente, las palabras-policía que usa el PSOE me resbalan como el jabón. No me parece que ese partido tenga derecho a dar lecciones a nadie sobre respeto por la mujer. Como ya recordé aquí, estas palabras fueron pronunciadas el 4 de octubre de 1931:
“Poner un voto en manos de la mujer es hoy, en España, realizar uno de los mayores anhelos del elemento reaccionario”
Lo dijo la diputada del PSOE Margarita Nelken, a la que ahora ese partido la presenta como una pionera pero no menciona su rechazo al sufragio femenino. El 9 de diciembre de 1933, tras aprobarse el voto femenino, el destacado dirigente socialista Indalecio Prieto lo descalificó con estas palabras: “Se ha dado una puñalada trapera a la República”. Hoy en día la web del PSOE le recuerda como una de las “Grandes Figuras del Socialismo Español”.
Ayudar a las embarazadas sin recursos es ‘ultraderechista’, según el PSOE
El feminismo del PSOE consiste en utilizar a la mujer como un reclamo
político, pero apresurándose a atacarla en cuanto sus preferencias se
salen de los moldes ideológicos del feminismo más radical. Sin ir más
lejos, basta recordar la vergonzosa intervención en 2009 de la diputada socialista y feminista radical Laura Seara, tachando
de “ultraderechista” una iniciativa social cuyo fin es ayudar a las
madres embarazadas sin recursos que desean tener a sus hijos.
Por lo visto, lo feminista es abortar. El cacareado “derecho a decidir”
con el que atacan los derechos de los niños por nacer debe ser en
realidad, para las abortistas del PSOE, un derecho a decidir sólo lo que ellas digan.
Ser madre es el “modelo familiar de la ultraderecha”, según el PSOE
De hecho, en 2011 otra dirigente socialista, Beatriz Sestayo, arremetió contra las ayudas a las embarazadas identíficándolas con “el modelo familiar de la ultraderecha”.
Y es que si del PSOE depende -de hecho ha votado en contra de las
ayudas a las madres embarazadas siempre que ha tenido ocasión- las
ayudas sólo serían para abortar. Si te quedas embarazada y quieres tener a tu hijo -que es lo natural-, no te mereces ninguna ayuda porque para el PSOE eres una ultraderechista. Y éstos aún se atreven a presumir de defensores de la mujer…
¿Lo genuinamente femenino es llamar ‘derecho’ a matar a tus hijos por nacer?
Estas y otras cosas me llevan a tener cada día menos miedo a las
citadas palabras-policía que usa el PSOE para estigmatizar a quienes no
suscribimos sus disparates ideológicos. En su intervención de hoy, por
ejemplo, Elena Valenciano identificó el aborto con la defensa de
la mujer, como si matar a los hijos por nacer fuese la panacea de la
feminidad. Si los demagogos del PSOE son los que reparten ahora
los carnets de feminismo, el mío lo rechazo si tenerlo me obliga a
justificar que se mate a seres humanos inocentes e indefensos, a callar
ante el hecho de que el PSOE mantenga en sus filas a un dirigente
regional condenado por dar una paliza a su mujer, a suscribir burradas
como que ser madre es cosa de ultraderechistas e incluso a aplaudir
disparates como que las mujeres conciben seres no humanos. Antes bien,
me quedo con las sabias palabras de Elizabeth Cady Stanton, una de las pioneras del movimiento por los derechos de la mujer en Estados Unidos:
“Cuando consideramos que las mujeres son tratadas como una propiedad, es degradante para las mujeres que tratemos los hijos como una propiedad que se puede desechar como queramos.”
Y con las palabras de la feminista Alice Paul, que dirigió la
campaña que dio lugar a la 19ª Enmienda de la Constitución de EEUU, que
otorgó el derecho de voto a la mujer:
“El aborto es lo último para abusar ilegítimamente a la mujer, el aborto es violarte hasta las entrañas.”
