Habiéndose
iniciado la campaña para las Primarias Abiertas, Simultáneas y
Obligatorias (PASO), quiero renovarle como precandidato a la Presidencia
de la Nación Argentina por el Frente NOS mi afecto y consideración,
cualquiera sea su jerarquía y situación de revista.
Desde
hace años, diría desde la misma vuelta de la democracia en 1983,
venimos escuchando promesas de reformas en las Fuerzas Armadas, que en
la práctica no resultaron más que sucesivas adaptaciones a presupuestos
decrecientes, con la complacencia del poder de turno. La decadencia se
fue manifestando en todos los órdenes y llegamos a la situación inédita
en el mundo de FFAA humilladas y perseguidas desde el propio Estado que
las cobija, como sucedió en particular durante los doce años del
kirchnerismo.
Lamentablemente
muchos
integrantes de las FFAA fueron seducidos y confundidos y terminaron
siendo engranajes de una máquina que no dudó en acabar con las carreras
de brillantes soldados por razones de sangre o ideológicas.
En
2015 creímos que comenzaba una nueva etapa, que definitivamente
rompíamos con la inercia del pasado para iniciar el camino de la
reconstrucción del Sistema de Defensa. No fue así, y nos encontramos
ante una nueva decepción. Promesas incumplidas, planes dejados a un lado
en nombre del oportunismo, la coyuntura económica, la ignorancia y la
falta de apego a lo nacional. El resultado es un sistema que profundiza
su deterioro y que este año alcanzó el record del menor presupuesto real
de la historia de las FFAA. Ese deterioro tiene su correlato en
accidentes, pérdidas de vida y patrimonio, crisis vocacionales y
debilitamiento del sistema hasta su incapacidad para cumplir su misión.
Ni la tragedia del ARA San Juan, ni la tercerización de la Defensa de
nuestra Patria durante la cumbre del G-20, ni el lapidario informe del
año 2018 del Fiscal Di Lello sobre la dramática situación de la Defensa
Nacional han conmovido a este gobierno o a la oposición.
En
las últimas semanas hemos visto como desde el gobierno se ha procurado
un acercamiento tardío a las FFAA, en un inocultable intento por
recuperar el llamado “voto militar”, dado los mensajes negativos
percibidos por los armadores de la campaña. Lo considero un desprecio a
su inteligencia. Usted es además un ciudadano, tal vez con familia, que
vive la decadencia moral y social y la dificultad económica todos los
días.
Estoy
convencido que no solamente compartimos las inquietudes sobre el futuro
de la Defensa de espacios terrestres, marítimos, aeroespaciales y
cibernéticos, soberanos, usurpados y pretendidos, sino que también,
mayoritariamente, somos defensores de la vida desde la concepción y
hasta la muerte natural, así como de los valores y tradiciones que
hicieron grande a nuestra Nación. El frente NOS no duda en este aspecto y
tiene un mensaje inequívoco, como se puede ver en todos nuestros
canales de comunicación. ¿Si el Estado no puede garantizar la vida del
ser más indefenso cómo suponemos que podrá garantizar otros derechos?
Nos
quieren convencer que no es hora de pedir a la clase política, sino de
impedir: de impedir que el otro siga o vuelva al poder. Desde el Frente
NOS no caemos en esa trampa y esperamos que todos los argentinos que
comparten nuestros valores nos acompañen el próximo 11 de agosto. Somos
muchos, falta que marchemos juntos. Sin especulaciones oportunistas y
mirando hacia el futuro.
Con
mi compañera de fórmula, Cynthia Hotton, estamos convencidos que
contamos con el equipo y las propuestas necesarios para RESCATAR
ARGENTINA. Le adjunto las más importantes en materia de Defensa
Nacional, el resto podrá encontrarlas en nuestros canales digitales de
comunicación.
Lo invito a acompañarnos. Un abrazo y ¡DIOS BENDIGA A LA ARGENTINA!
prisioneroenargentina.com